“ Se necesita transparencia, informar a los docentes y estudiantes qué prueba es la que se va a aplicar, pero sobre todo necesitamos nivelar para arriba y no al revés”.

El año 2010 se aplicó por primera vez el Simce inglés. En aquella oportunidad manifestamos que nos preocupaba que se pusiera más énfasis en la medición que en el proceso. Ya se habían hecho mediciones los años 2004 y 2008, por lo que los resultados no traerían mayores sorpresas. De un 3% de logro en 4to medio en la muestra del 2004 se llegó a un 11% en 3ro medio del 2010. Resultado, se avanza pero lento.

Con la medición de este año habremos adelantado sólo otro pasito y además para medir cuánto mejoramos, usaremos un termómetro caro. Cada medición cuesta cerca de 2 millones de dólares, si se mide durante toda esta década, el 2020 habremos gastado 10 millones de dólares. La pregunta es que si gastamos 10 millones de dólares en el termómetro, cuánto invertiremos para que mejore el resultado? Si hay un plan para enfrentar este desafío, muy bien; sino, podríamos adelantar hoy los titulares de los resultados del Simce 2020.

Pero ya está, la prueba se hace y entonces lo mejor es ponerse en disposición de aprovecharla. Así muchos estudiantes, profesores, directores y familias en general se han estado preparando para el mismo tipo de prueba del año 2010. La lógica indica que habría que usar un examen similar para poder hacer comparaciones válidas luego.

Sin embargo, hemos conocido que este año la prueba que se ha adjudicado (según lo publicado el profesor Thomas Baker citando a la página de compras del Gobierno) es el examen de Cambridge KET, que dicho sea de paso, es un muy buen test. El problema es que su nivel es para octavo básico (de acuerdo al currículum nacional de Inglés elaborado por el Mineduc) y no para tercero medio. Como profesores de inglés, estamos seguros que bajar la vara no es la solución, nadie quiere que le “regalen nota”. Mejorar sustantivamente el nivel de inglés de los chilenos es un proceso largo, siempre hemos insistido en eso. Medir los logros cada dos años sólo indicará, en el mejor de los casos, que cada vez se avanza un poquito más.

Aprender inglés, que duda cabe, es importante. El Presidente de la República con muy buena intención ordenó implementar un Simce inglés. Eso sí, que se necesita transparencia, informar a los docentes y estudiantes qué prueba es la que se va a aplicar, pero sobre todo necesitamos nivelar para arriba y no al revés.